Time is money”: un análisis del trabajo domestico no remunerado por sexo y edad a partir de las encuestas de empleo del tiempo por Italia y España”

“Time is money”. Esta cita de Benjamin Franklin (1748) usada para describir el coste oportunidad, es particularmente eficaz para describir el valor del tiempo dedicado, dentro del hogar, a satisfacer las necesidades de sus miembros. El trabajo doméstico no remunerado, a pesar de su importancia social y económica, no se contabiliza en las cuentas nacionales. El sistema de cuentas nacionales (SCN), que establece normas comunes para el cálculo de la renta nacional, considera actividades productivas sólo aquellas comprendidas en las transacciones de mercado. La exclusión del trabajo doméstico no remunerado de las cuentas nacionales conduce a una subestimación del valor de la producción total y, en particular, de la proporcionada por las mujeres que, aunque con diferencias significativas entre países, tienden a invertir más tiempo en actividades productivas dedicadas al hogar y al cuidado familiar. La falta de visibilidad de la contribución económica de las mujeres perpetua la desigualdad de género, (Waring, 1999). La introducción de las transferencias de tiempo en el análisis no es tarea fácil, y esa es la razón principal por la que el uso del tiempo ha sido poco utilizado en economía o en las ciencias sociales en general. Sin embargo, en las décadas recientes, ha proliferado la producción de encuestas del uso del tiempo, lo cual ha facilitado el aumento de estudios sobre este tema (Folbre, 2004). Esta literatura muestra que en la mayoría de casos, las mujeres adultas, especialmente a partir del momento en que son madres, dedican más tiempo a las tareas productivas domésticas (Durán, 2010; Folbre, 2004; EUROSTAT, 2004). Este patrón es especialmente acentuado, en el contexto europeo, en los países mediterráneos que tienen un diferencial de tiempo mayor entre hombres y mujeres dedicadas a tareas domésticas (Durán, 2010). Por otra parte, en otros países europeos en los que las mujeres dedican menos tiempo a las tareas domésticas y donde ha habido una mayor voluntad de aplicar políticas de equilibrio entre las esferas de la familia y el trabajo, las mujeres todavía no han hecho grandes cambios en relación a su participación en jornadas completas, ya que el número de horas trabajadas no ha aumentado en las últimas décadas (Jonung y Persson (1993) para Suecia; Hakim (1993; 1996) para Inglaterra). El objetivo del articulo es, en primer lugar, identificar actividades productivas en la Encuesta de Empleo del Tiempo (EET). Asignar un valor monetario a las actividades domésticas productivas, con el fin de hacerlas comparables con los "clásicos" modelos de las actividades productivas consideradas por SCN, basados en el mercado. Finalmente, estimar la edad y sexo, perfiles específicos de consumo de tiempo y producción. A continuación se evaluará la comparación de los perfiles de consumo de tiempo y producción y el tiempo excedente o déficit por sexo y edad. El trabajo se centrará en dos países del mediterráneo, Italia y España, con referencia a las últimas encuestas de empleo del tiempo disponibles (Italia, 2008/2009; España 2009/2010).